Por Paolo Bessolo*
En la actualidad, el monitoreo de redes es de gran relevancia, debido a cuatro importantes razones:
- Visibilidad clara de la red: Mediante el monitoreo de red, los administradores pueden obtener una imagen clara de todos los dispositivos conectados a la red, ver cómo se mueven los datos por ella, e identificar y corregir rápidamente los problemas que pueden afectar el rendimiento y causar fallas.
- Mejor uso de los recursos de TI: Las herramientas de hardware y software de los sistemas de monitoreo de red reducen las tareas manuales para los equipos de TI. Esto significa que el valioso personal de TI puede tener más tiempo para dedicarse a los proyectos esenciales para la organización.
- Análisis temprano de las necesidades de infraestructura futuras: Los sistemas de monitoreo de red pueden proporcionar informes de rendimiento de los componentes de la red en un período determinado. Mediante el análisis de estos, los administradores de red pueden anticiparse a las necesidades de la organización respecto a la actualización o la implementación de la infraestructura de TI nueva.
- Capacidad para identificar amenazas de seguridad más rápido: El monitoreo de red ayuda a las organizaciones a entender cuál es el rendimiento “normal” de las redes. Por lo tanto, cuando se produce actividad inusual, como un aumento inexplicable de los niveles de tráfico de red, los administradores pueden identificar los problemas más rápido y determinar si se puede tratar de una amenaza para la seguridad.
En resumen, el monitoreo de redes es esencial para mantener la red funcionando de manera óptima, prevenir incidencias, detectar problemas con anterioridad y ahorrar costos y tiempo. Es una instancia clave para anticiparse a posibles contratiempos y aprovechar al máximo los recursos de hardware.
* Especialista de ITQ Latam.