Google intensificó sus esfuerzos para vigilar el ecosistema Android el año pasado, bloqueando la publicación de 2,28 millones de “aplicaciones que violan las políticas” en la tienda Google Play.
La cifra es más de un 59% superior a los 1,43 millones de aplicaciones que Google bloqueó en 2022. El gigante tecnológico dijo que sus esfuerzos se redujeron a “invertir en funciones de seguridad nuevas y mejoradas, actualizaciones de políticas y procesos avanzados de revisión de aplicaciones y aprendizaje automático”.
“También hemos fortalecido nuestros procesos de revisión e incorporación de desarrolladores, requiriendo más información de identidad cuando los desarrolladores establecen por primera vez sus cuentas de Play”, continuó Google.
“Junto con las inversiones en nuestras herramientas y procesos de revisión, identificamos a los malos actores y las redes de fraude de manera más efectiva y prohibimos 333.000 cuentas malas de Play por infracciones como malware confirmado y violaciones graves repetidas de las políticas”.
Una vez más, esta cifra eclipsa la cifra de 2022 para cuentas de desarrollador prohibidas. Hace dos años era un 92% menor, con 173.000 cuentas malas.
Google dijo que también rechazó o solucionó alrededor de 200.000 envíos de aplicaciones “para garantizar el uso adecuado de permisos confidenciales como la ubicación en segundo plano o el acceso a SMS”. Se asoció con proveedores de SDK para limitar el acceso y el intercambio de datos confidenciales para mejorar la postura de privacidad de docenas de SDK vinculados a 790.000 aplicaciones.
Su índice de SDK de Google Play también se ha ampliado para cubrir los SDK utilizados en alrededor de seis millones de aplicaciones de Android, lo que ayuda a los desarrolladores a mejorar la calidad de sus aplicaciones, reducir los riesgos de integración y tomar mejores decisiones de seguridad y privacidad.
