Los ataques DDoS a finales de 2023 casi cuadruplicaron el promedio del país, según las observaciones de la empresa de ciberseguridad, NetScout.
El aumento comenzó cuando el partido Ley y Justicia (PiS) perdió su mayoría en las elecciones generales polacas del año pasado. El PiS había gobernado el país desde 2015. Fue reemplazado por un gobierno de coalición, que reafirmó el apoyo a la defensa de Ucrania contra la invasión rusa.
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Varias bandas de hacktivistas respondieron rápidamente con una avalancha de ciberataques. El grupo más notable fue NoName057, que comenzó a apuntar a la nación a finales de diciembre.
Una gran parte de los ciberataques fueron impulsados por botnets. NoName057 tenía una predilección particular por las botnets que ejecutaban un código llamado DDoSia, a menudo desde una infraestructura de alojamiento pública.
Durante los períodos de malestar nacional, los hacktivistas frecuentemente bombardean a sus oponentes políticos. Otro ejemplo reciente es la salva de ataques DDoS del pasado diciembre en Perú, que surgió después de que el ex presidente Alberto Fujimori fuera liberado de prisión.
La guerra en Gaza también ha provocado un aumento de la actividad DDoS. Entre la primera y la segunda mitad de 2023, las huelgas diarias se multiplicaron por más de diez.
Para mitigar los riesgos, la compañía aconseja a las organizaciones que empleen sistemas de defensa DDoS capaces. También deben garantizar que el software tenga visibilidad avanzada de cualquier amenaza potencial, antes de que se convierta en arma política.