El régimen norcoreano obtiene alrededor de la mitad de sus ingresos en divisas de ciberataques contra criptomonedas y otros objetivos, según ha afirmado un diplomático estadounidense.
Un alto funcionario de la administración Biden dijo a Nikkei que los ataques dirigidos por la nación ermitaña habían aumentado considerablemente desde 2018, en paralelo con sus programas nucleares y de misiles.
“Estamos muy preocupados de que los robos de criptodivisas, los ciberataques, sean una fuente significativa de financiación para el régimen de Pyongyang, y nos preocupa que alrededor del 50% de sus ingresos en moneda extranjera provengan del robo cibernético”, habría dicho el funcionario al noticiero.
Estimaciones surcoreanas citadas por Nikkei afirman que el régimen de Kim Jong-un emplea a unos 10.000 operativos para apoyar una campaña expansiva de ciberataques con motivaciones financieras.
Otros miles de informáticos son enviados al extranjero con documentación falsa para trabajar como autónomos en economías desarrolladas, prosigue el informe.
A los piratas informáticos norcoreanos se les atribuyen algunos de los mayores robos de criptomonedas de la historia, como los 620 dólares robados a la red Ronin de Sky Mavis el año pasado y los 281 millones de dólares sustraídos a KuCoin en 2020.
Utilizan técnicas cada vez más sofisticadas para conseguir lo que quieren. Se cree que los ataques a la cadena de suministro de 3CX, en los que se implantó malware de puerta trasera en una actualización de software de aspecto legítimo del proveedor de comunicaciones del mismo nombre, fueron un intento dirigido de golpear a los intercambios de criptomonedas.
