El 48,4% indicó usar plataformas online para el pago de facturas de servicios en los últimos meses, mientras que la opción de pago en las redes de locales de cobranzas, que hasta hace un año era la preferida con un 40,3%, cayó al 23,3% durante la cuarentena.
MONI, la innovadora compañía de servicios financieros digitales que opera en Argentina y Colombia a través de su billetera virtual, dio a conocer los resultados de una encuesta comparativa realizada entre el 15 y el 30 de junio a 1.734 clientes que han utilizado los servicios de su plataforma los últimos 24 meses. La comparación de resultados de esta encuesta con relevamientos anteriores muestra el impacto que la pandemia y el aislamiento preventivo obligatorio están tendiendo en las finanzas personales de los argentinos, al relevar un importante crecimiento en el pago de facturas de servicios a través de plataformas online y canales digitales y un mayor uso y adopción de los pagos con QR.
En este sentido, el uso de plataformas online como Moni, PagoMisCuentas, MercadoPago, LinkPagos y otras para cancelar las facturas de servicios pasó del 33,7% en junio del año pasado al 48,4% en junio de 2020. Asimismo, en el mismo periodo, quienes informaron pagar con débito automático pasaron del 17,9% al 22,3%, mientras que el porcentaje de quienes lo hicieron por cajero automático creció del 4,6% en 2019 al 5,7% este año.
En sentido inverso, los datos de junio de este año muestran una importante caída en el uso de canales presenciales para el pago de servicios. Así, la cancelación de facturas de servicios en locales y cadenas de pagos como Rapipago, Pagofácil y Provincia NET Pagos cayó del 40,3% en junio de 2019 al 23,3% en junio de 2020, mientras que el pago en la caja del banco pasó del 3,5% al 0,3% en el mismo periodo.
Sobre estos resultados, Juan Pablo Bruzzo, CEO de Moni afirmó: “Las restricciones de circulación y el distanciamiento físico generaron condiciones únicas que forzaron un quiebre en muchos usos y costumbres arraigados culturalmente, haciendo que muchas tendencias se aceleraran a un ritmo impensado. Como parte de este fenómeno, la curva de adopción de los pagos digitales y otras herramientas financieras accesibles online han tenido en estos tres meses un impulso extraordinario, equivalente a varios años en condiciones normales”.
Al igual que con el pago de servicios por canales digitales, los pagos con QR han tenido un notable crecimiento en los últimos 12 meses, con una particular evolución durante la pandemia a partir de las restricciones que impuso el aislamiento preventivo y obligatorio. Así, al ser consultados sobre la utilización de los pagos con QR en los últimos meses, surge que el 48,5% nunca ha realizado pagos de este tipo, mientras que sí lo ha hecho el 51,5%, respondiendo a la siguiente segmentación: 19,8% realiza pagos con QR muy de vez en cuando, el 17,4% lo hace de manera regular y el restante 14,3% ha pagado con QR en una única oportunidad.
Estos resultados, comparados con los de la encuesta realizada un año atrás muestran una evolución particularmente relevante en la adopción de los pagos con QR, con una caída de 16 puntos en la participación de quienes indicaron hace un año atrás no haber utilizado nunca este tipo de pagos.
“Antes de la pandemia tuvimos en el país una primera gran ola de desarrollo de los pagos con QR a partir de la incorporación al sistema de grandes cadenas de fast food y estaciones de servicio, así como de almacenes, despensas y otros comercios de cercanía. Si bien la cuarentena y los protocolos de distanciamiento físico han impulsado esta opción de pago sin contacto, también en un punto han frenado su desarrollo, por las menores oportunidades de uso debido a la gran caída del consumo generada por el aislamiento”, agregó Juan Pablo Bruzzo.
Dado que los pagos con QR no requieren dispositivos adicionales en el comercio y pueden funcionar con teléfonos de gama media o baja, son la mejor opción para un desarrollo y adopción masivos, más aun tomando en cuenta que en poco tiempo veremos, con la implementación del QR interoperable, una evolución del sistema que generará un nuevo salto exponencial en el uso de los pagos digitales en el país.
Situación financiera y perspectivas a futuro
Al consultar durante junio a los participantes de la encuesta sobre cómo definirían el estado financiero de la empresa en la que trabajan respecto a la situación 1 año atrás, el 57% afirmó que la situación financiera de su empleador está peor, el 27% indicó que la situación financiera de su empresa está igual y solo un 16% sostuvo que las finanzas de la organización para la que trabaja están mejor mirando un año atrás.
Asimismo, al indagar sobre la percepción de los encuestados respecto a la situación de la economía argentina comparada con el año anterior, el 65% de los consultados afirmó que considera que la economía argentina está peor, el 28% sostuvo que está igual, y el 7% restante indicó que cree que la economía del país está mejor que 12 meses atrás.
La investigación también avanza sobre la percepción de los participantes respecto a sus propias finanzas personales. En este sentido, el 44% afirmó que su situación financiera está peor en comparación con el estado de sus finanzas un año atrás. Por su parte, el 39% indicó que sus finanzas personales se encuentran en el mismo estado que hace 1 año y solo un 17% sostuvo que sus finanzas personales se encuentran mejor que el año pasado.
Sobre estos resultados, Juan Pablo Bruzzo, CEO de MONI, afirmó: “Argentina está sufriendo las consecuencias de un combo muy complejo, en el que la debilidad que ya arrastraba la economía al inicio del año se combinó con los múltiples impactos de corto y mediano plazo que la pandemia, -y las acciones se llevan adelante para mitigarla-, están teniendo en toda la cadena de la economía, desde la operatividad y producción de las empresas, la caída en los niveles de consumo y el deterioro de la cadena de pagos hasta las finanzas de las personas”.
En relación a las expectativas de corto plazo, al consultar a los participantes sobre cómo consideran que evolucionarán sus finanzas personales en los próximos seis meses, el 69% cree que su estado financiero va a evolucionar de manera negativa durante el próximo semestre, un 25% considera que la evolución de sus finanzas se mantendrá igual que ahora y apenas un 6% confía en que su situación financiera evolucionará para mejor de cara a los próximos 6 meses.
Como un actor clave del ecosistema fintech regional, MONI está ampliando su oferta de servicios financieros digitales, especialmente entre los segmentos sub-bancarizados. Actualmente provee créditos de dinero, tarjeta Mastercard Internacional, pago de servicios y recargas de SUBE y celulares a través de su billetera digital, y prevé seguir incorporando servicios para mejorar aún más la experiencia de uso de sus clientes.