Muchos empleados corporativos, están aptos para almacenar datos altamente sensibles en la nube. Sin embargo, muchos todavía son escépticos sobre la postura de seguridad de sus propias organizaciones, según una encuesta de Armor, que obtuvo respuestas de 37.000 usuarios de Twitter en un período de 13 semanas.
Otros hallazgos clave adicionales, muestran que la reducción del coste de gestión de la seguridad, el mantenimiento del cumplimiento, y la mejora de las capacidades de respuesta a incidentes, son piezas importantes del rompecabezas de la seguridad, a medida que la transformación digital empuja a las empresas hacia la adopción de la nube.
Muchos encuestados (46%) han colocado datos sensibles en nubes privadas, y otros (41%) están planeando trasladar su información más sensible a la nube, durante los próximos 2 años.
La responsabilidad compartida, sigue siendo mal entendida. En comparación con la encuesta de 2017, prácticamente no ha habido cambios en los porcentajes de encuestados, que no saben lo que significa la responsabilidad compartida para el cloud computing (50% en 2017 y 47% en 2018) y en los que la definen como parte de su estrategia central (24% en 2017 frente a 21% en 2018).
Las organizaciones quieren reducir el coste de la seguridad, lo que sigue siendo prioridad para los participantes en la encuesta. Sin embargo, también pretenden un equilibrio con la necesidad de monitoreo de usuarios, administración de acceso y administración de configuración. La elección de un proveedor externo que esté en condiciones de ofrecer un cóctel de estas capacidades, puede suponer un importante ahorro en el gasto, para las empresas.